Hoy Victoria Reyero y yo hablamos de enriquecimiento ambiental felino.
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Enlaces de interés:
Puzzles para que alimentar a tu gato dándole la oportunidad de explorar
http://foodpuzzlesforcats.com/
Recursos básicos de los gatos sin acceso al exterior
https://indoorpet.osu.edu/pet-owners/cats-spanish
Enriquecimiento ambiental: cómo gatificar tu casa
https://www.facebook.com/groups/enriquecimientoambientalparagatos
https://www.instagram.com/miauhome.ft/
No sufrir hambre, sed o malestar es la base del bienestar animal. También necesitamos la libertad de expresar los comportamientos naturales de nuestra especie y no pasar miedo ni sufrir estrés. Los gatos como especie tienen además unas necesidades determinadas. Por ejemplo, necesitan tener la posibilidad de estar solos. Esto no debería sorprendernos, porque el antecesor del gato era un animal solitario a diferencia del antecesor del perro o del Homo sapiens. Dependiendo de la genética, el ambiente y las experiencias que tenga durante las etapas más tempranas de su vida (incluida la gestación), las habilidades sociales del gato doméstico de hoy en día varían mucho de un individuo a otro.
Cuando adoptamos un gato debemos ofrecerle unas condiciones que aseguren su bienestar. Si no les permitimos mostrar su comportamiento natural pueden tener problemas, incluso de salud como resultado del aburrimiento, la inactividad y el estrés. Por eso necesitan un ambiente adecuado que ofrezca unos recursos determinados.
Los gatos pueden adaptarse a vivir en el interior de una casa, pero este confinamiento perpetuo puede tener consecuencias graves, como en cualquier animal, incluido el ser humano. Durante la pandemia todos hemos aprendido de los efectos del confinamiento en carne propia.
Para evitar tener
problemas con tu gato es importante evaluar el entorno que le ofreces, la
presencia y la calidad de los recursos físicos y la oportunidad que le das de
expresar determinadas conductas. No lo dejes pasar hasta que las cosas
empiecen a ir mal, porque prevenir siempre es mejor que curar. El ambiente
gatuno debe incluir recursos físicos, nutricionales y sociales y también
recursos relacionados con los comportamientos de marcaje, juego y eliminación.
Un espacio libre de cosas que provoquen miedo y una rutina diaria relativamente predecible harán que el gato perciba que tiene cierto control sobre la situación. Este es el punto de partida más importante, para asegurar el bienestar de tu gato.
Sobre todo si tienes más de un gato en casa, es importante que les proporciones varios lugares seguros y cómodos para evitar que compitan por la mejor cama.
Los gatos de interior necesitan acceso sin restricciones a las áreas de descanso, en los que los factores estresantes deben reducirse al mínimo. Algunos factores estresantes frecuentes en el hogar son por ejemplo los ruidos fuertes e impredecibles (como el de la lavadora o el lavaplatos) y la presencia de perros, otros gatos o niños que aún no han aprendido a interaccionar correctamente con el animal.
Los gatos también necesitan lugares altos donde descansar y desde los que observar qué ocurre a su alrededor, sin que otros animales o personas puedan alcanzarles. No olvidemos que el gato es un cazador, pero que al mismo tiempo también puede ser presa de otros depredadores. Como lugares altos pueden servirnos nuestros propios muebles (un espacio en lo alto del armario o en lo alto de la nevera) pero también podemos crear lugares específicos para ellos. En la página de “enriquecimiento ambiental felino” en Facebook, gestionada por nuestra compañera Tania Velasco Rubio, encontrarás un montón de ideas al respecto.
Un lugar seguro y popular entre los gatos puede ser una simple caja de cartón o incluso, su propio transportín en una habitación o un área tranquila de la casa. Otra idea es usar puertas gateras electrónicas para que el acceso a una habitación determinada sea selectivo. Así se evita que otro gato o perro invada el escondite de cada gato.
Aunque las dietas comerciales satisfacen generalmente las necesidades nutricionales del gato, la manera en que lo alimentamos puede no ser la más apropiada. Lo habitual en casa es que el gato se acerque al recipiente de comida y engulla todo de golpe. Sin embargo, en la naturaleza, el gato tiene que cazar! Y para lograrlo primero tiene que explorar. Cómo la exploración en casa está limitada por el espacio, podemos utilizar puzles de comida que obligan al animal a interactuar físicamente con ellos para llegar al alimento. También es conveniente practicar juegos que le permitan dar salida a sus instintos de caza.
Si tienes más de un gato, aliméntalos por separado. Aunque no lo muestren como lo haría un ser humano (es obvio: ellos no hablan) en general no les gusta compartir su recipiente con otro ni tampoco estar cerca de otros gatos mientras comen. Preferiblemente tendrían que estar fuera de la vista del otro gato y en una zona tranquila.
Los gatos generalmente prefieren comer varias comidas pequeñas al día en lugar de una o dos comidas abundantes. Sin embargo en gatos que viven exclusivamente en el interior esto puede ser contraproducente, porque ese acceso tan fácil al alimento, en un entorno en el que estar aburrido no es difícil, aumenta la ingesta de comida y conduce con frecuencia a la obesidad.
En general los gatos no beben mucho. En condiciones normales, no pasa nada porque su organismo está adaptado y compensa esta deficiencia concentrando mucho la orina. Sin embargo, puede llegar un momento de su vida en el que la hidratación sea necesaria como parte de alguna terapia (por ejemplo en enfermedades urinarias o estreñimiento). En estos casos es muy útil haber acostumbrado al gato a comer comida húmeda. Para conseguirlo, debemos ofrecer alimento húmedo desde que el gato es pequeño, cuando aún se encuentra en el periodo sensible en el que aún es capaz de adaptarse a cosas diferentes. Las fuentes de agua corriente son un recurso muy atractivo para ellos y pueden favorecer el consumo de agua.
Elegir bandejas adecuadas para nuestros felinos es otro punto importante. Al orinar o defecar se produce una secuencia de comportamientos que incluyen excavación, postura de eliminación y cobertura de los excrementos y la orina. Debemos averiguar las preferencias individuales de nuestro gato. Es recomendable ofrecer areneros grandes y abiertos y distribuirlos por diferentes habitaciones, lejos del alimento y el agua. Lo recomendable es tener una bandeja por gato, más una adicional. Las bandejas cubiertas a veces generan rechazo porque pueden atrapar los olores, pero algunos gatos valoran la privacidad que les brinda. Lo del tipo de arena también es cuestión de gustos, pero generalmente prefieren arena no perfumada de textura fina. La arena aglomerante tiene la ventaja de que facilita la limpieza de la bandeja. Un arenero limpis es indispensable para que el gato siga acudiendo a ella y no empiece a orinar o defecar en otras partes de la casa. Los excrementos deben ser retirados todos los días y debemos cambiar la arena completamente una vez a la semana. Para lavar la bandeja debemos usar agua y jabón o detergente diluido y evitar los productos con olores fuertes como la lejía.
Es muy importante que la ruta del gato hacia el arenero no sea bloqueada por otro animal u otro elemento disruptivo (ej: aspiradoras automáticas que se mueven de manera errática).
El ambiente social de tu gato incluye a todos los animales que comparten su espacio. Sin no todos los animales que conviven en el mismo hogar pertenecen al mismo grupo social. Incluso en hogares en los que sólo hay dos gatos es muy posible que uno de ellos o ambos no se consideren parte de un grupo social.
Aunque todo depende de la personalidad y las particularidades sociales de cada gato, es necesario dejarle a él que elija si quiere interactuar o no, sobre todo al principio, mientras propietario y gato se están conociendo. Nuestra forma de interactuar generalmente conlleva un contacto físico de duración más bien larga e intensidad alta. Los gatos prefieren interactuar sólo brevemente y a través de encuentros de poca intensidad. Esta diferencia entre las formas de interacción de primates y felinos ocasiona a veces una molesta falta de comprensión mutua. A algunos gatos les gusta que su propietario los acicale y otros prefieren interactuar con ellos desde el juego.
A la hora de introducir un nuevo gato en el hogar se deben seguir unas pautas adecuadas. El conflicto entre gatos es común. Nunca debemos dar por sentado que el gato residente aceptará y se hará amigo del gato nuevo. Cuando surge antagonismo entre ambos es conveniente pedir ayuda a un experto en comportamiento felino.
Para evaluar el grado de estrés asociado a las interacciones es conveniente que aprendas a leer el lenguaje corporal y las expresiones de tu gato. Originalmente el gato tenía un estilo de vida solitario y no necesitaba comunicarse con otros miembros de un grupo, por lo que sus mecanismos de comunicación pueden no resultarte tan obvios como los de otras especies más gregarias como el perro.
Las señales de alarma en interacciones entre gatos son relativamente fáciles de reconocer: los animales se acechan entre sí, se dirigen ruidos intimidantes y se muestran el flanco, con las patas rectas y el pelo erecto (para parecer más grandes). Si ninguno retrocede puede iniciarse una lucha entre ellos. Si en cambio se trata de un conflicto silencioso, el gato que se siente amenazado se aleja, pasa menos tiempo con la familia e intenta interactuar sólo cuándo el gato por el que se siente amenazado está lejos.
En algunos casos, sobre todo en aquellos en los no se es plenamente consciente de las necesidades comportamentales felinas, el propietario puede considerar indeseables algunos comportamientos naturales, sobre todo cuando tienen efectos sobre elementos valiosos del hogar como las plantas, los muebles o la decoración.
El comportamiento rascado es uno de ellos. El rascado ayuda a mantener las uñas en buen estado. Además sirve para marcar el territorio a través de las marcas visuales y las feromonas.
El sustrato favorito varía entre individuos, pero en general para que cumplan su propósito, los postes de rascado deben tener una base muy estable que no se tambalee y una altura mínima de una vez y media el largo del animal, porque cuando los gatos rascan se apoyan en las patas traseras y estiran todo el cuerpo.
En general les gustan los materiales que permitan que las garras se enganchen, como la corteza de los árboles. Los gatos tienden a rascar objetos verticales localizados en áreas donde pasan gran parte de su tiempo. Suelen rascar después de descansar y a veces también cuando encuentran excitados por algún motivo.
Ofrecer hierba gatera u otro tipo de hierba no tóxica que le guste, puede reducir la tendencia de algunos a mordisquear nuestros objetos. Puede ayudar ofrecerles regularmente algún tipo de novedad, como alimento con una textura diferente a la habitual o juguetes con catnip. Las plantas tóxicas, como los lirios, deben ser retiradas del hogar o colocadas en lugares seguros.
El juego está estrechamente relacionado con los elementos del comportamiento depredador: acecho, persecución, salto e inmovilización de la presa. Los gatos disfrutan persiguiendo objetos, lanzándolos al aire y saltando. Una manera segura de interactuar con tu gato es utilizar juguetes que mantener una distancia de seguridad. Se debe evitar jugar con las manos y los pies, sobre todo mientras lo estás educando a una edad temprana, porque puedes favorecer conductas inapropiadas como acechar, abalanzarse y morder.
Los juguetes más populares son los de tipo “caña de pescar”, con una vara de cuyo extremo cuelga un hilo con un objeto pequeño, ligero y blando que simula una presa.
Otros juguetes apreciados son las varitas (les encantan los bolígrafos; hay que tener cuidado con la tinta!), juguetes autopropulsados (siempre que el ruido que hace no les asuste), bolas dentro de una caja o de la bañera y juguetes rellenos de hierba gatera. Si utilizamos punteros láser, debemos cumplir una regla: permitir que el gato cace la luz cada cierto tiempo y darle una recompensa para evitar la frustración de no cazar nada a pesar de todo el esfuerzo y tiempo invertido.
Los juguetes deben rotarse cada pocos días para mantener despierto su interés. Colocar sus lugares de observación y descanso cerca de una ventana también enriquecerá el ambiente al permitirles observar lo que ocurre fuera.
Hace poco se completó un estudio en el que se pusieron de manifiesto las carencias ambientales de los gatos en los hogares de Australia (Lawson GT, Langford FM, Harvey AM. The environmental needs of many Australian pet cats are not being met. J Feline Med Surg. 2020 Oct;22(10):898-906.)
Según los resultados de la encuesta, basada en más de 12000 respuestas a un cuestionario, sólo unos pocos participantes alimentaban a sus gatos de una forma que estimulara su comportamiento depredador.
En un 17% de los hogares, se habían observado problemas urinarios y una quinta parte se quejaba de que su gato orinaba o defecaba fuera de la bandeja. La incidencia de problemas urinarios era mayor en hogares con más de un gato, en aquellos con un número escaso de bandejas de arena , una frecuencia inadecuada de limpieza del arenero y en los que se utilizaba arena de cristal
Sería interesante averiguar qué problemas sufren los gatos de otras regiones geográficas, derivados de la carencia de los recursos ambientales necesarios.
